🧐 ¿Debe John Brooks ir a la Copa del Mundo con el USMNT? Cronología de su caso y evidencias
Hay razones suficientes para asegurar que John Brooks debe regresar a los planes del USMNT y tener un lugar en el roster del Mundial de Qatar 2022
El pasado viernes el entrenador en jefe de la selección nacional masculina de Estados Unidos (USMNT), Gregg Berhalter, decidió que John Brooks no iría convocado al campamento de junio. Pese a que es uno de los defensores centrales de EE. UU. más sólidos, veteranos y con sobrada experiencia al máximo nivel competitivo, la noticia de su omisión no sorprendió a todos aquellos que siguen de cerca al USMNT.
Su presencia en el Mundial, de hecho, es improbable también.
Berhalter y Brooks tuvieron un comienzo difícil en 2019, cuando el entrenador asumió por primera vez el puesto de trabajo después de que el USMNT no clasificase para el Mundial de 2018. Brooks, que había sido una pieza relativamente importante en el anterior ciclo, fue excluido: entre 2019 y 2020 apenas jugó 270 minutos de 1.980 disponibles (22 partidos) con la selección. Entonces, Brooks trabajó para volver al grupo y en 2021 se convirtió en una pieza central del equipo que ganó en junio la CONCACAF Nations League y que en septiembre empezó la carrera para clasificarse para la Copa del Mundo de 2022.
A los 28 años parecía haber recuperado su lugar. Pero Berhalter no lo ha permitido.
Cronología de los hechos
Septiembre, 2021: Convocado y juega.
Octubre, 2021: Convocado; antes de viajar para integrarse al campamento US Soccer comunica que se cae del roster debido a “problemas de espalda”.
Noviembre, 2021: Supuesta baja forma. “Mucho se basó en cómo sentimos que fue su desempeño con el equipo la última vez que estuvo actuando. Está trabajando para volver a estar en forma. Se trata solo de que recupere su forma y que rinda a un alto nivel cuando llegue su oportunidad”. Explicación sin sentido de Berhalter. Lo excluye por mala forma, aunque eso no fue un problema en octubre.
Enero, 2022: Se contradice con su explicación. “No hay absolutamente nada malo con la forma de John; no es el más adecuado para esta ventana concreta. Esperamos que recupere su forma para Wolfsburg y comiencen a ganar partidos y a subir en la tabla”. ¿Es porque no es el jugador adecuado, o por baja forma?
Marzo, 2022: Su estilo de juego no encaja. “Hay algunos detalles de su juego que le comenté que debe mejorar para encajar en nuestro modelo de juego. No tenemos tiempo el martes para mejorar estas cosas. Creo que habrá otra oportunidad para él [en junio y septiembre] y que entonces realmente podamos comenzar a abordar dónde creemos que están sus deficiencias, para ser el defensor central titular en nuestro grupo”. Nunca explicó cuáles son esos detalles débiles de su juego, además que eso nunca fue un impedimento para llamarlo en anteriores ocasiones.
Mayo, 2022: Probar nuevos jugadores. “Preferiría ver a un tipo como él [Carter-Vickers] para ver qué puede hacer porque ya sé lo que puede hacer John”.
Junio, 2022: Supuestamente regresaría en esta ventana, pero ahora la excusa para no traerlo es que cambia de club y no encaja: “John se moverá de club [este verano] y lo seguiremos ansiosamente, pero en este momento pensamos que es mejor usar este período de tiempo para ver a otros jugadores. Queremos jugadores que puedan encajar en nuestro modelo de juego, que puedan jugar en nuestro sistema o que puedan hacernos mejores. Ahora lo vamos a poder ver en un nuevo entorno, con suerte haciendo cosas similares a las que necesitamos que haga [con nosotros]. Eso podría ayudarlo a ganar opciones de estar en la lista. Simplemente eso”. Luego comprobaremos que hay múltiples jugadores en este roster que no encajan absolutamente en su supuesto modelo de juego; además que el hecho de cambiar de club este verano ha sido un problema para Brooks… pero no para otros jugadores:
Matt Turner: se traslada al Arsenal.
Otros jugadores que posiblemente se cambien y están incluidos: Tyler Adams, Djordje Mihailovic, Christian Pulisic, Haji Wright.
Las alegaciones del entrenador fueron diferentes en cada ventana y siempre ha justificado la ausencia de Brooks con vaguedades. La realidad es que tuvo que haber algún tipo de conflicto extra-deportivo entre ambos en septiembre/octubre de 2021 que puso al defensa en la lista negra de Berhalter, a quien no le ha importado contradecirse decenas de veces y poner excusas incoherentes para seguir omitiéndole.
De hecho, unas declaraciones del jugador en marzo llamaron mucho la atención y encendieron las alarmas ante lo que claramente no era un asunto deportivo: “No debería haber dudas sobre mi deseo de jugar para este equipo. Mi plan es luchar tan duro como pueda para regresar al USMNT”, dijo. “Mi identidad estadounidense está en juego, una identidad que algunos han cuestionado durante muchos años”.
John Brooks nació y se crió en Berlín, Alemania. Allí sirvió su padre, un nativo de Chicago, Illinois, durante más de 30 años para las Fuerzas Armadas de los EE. UU.
A las puertas de cumplir 30 años, Brooks parece que estará vetado del USMNT mientras el entrenador en jefe sea Berhalter. Y como una de las piezas defensivas de mayor calibre disponibles, sin él disminuye la oportunidad del equipo de ser más sólido atrás. Porque en el último año, si utilizamos como parámetro de partida a sus equivalentes posicionales de las cinco grandes ligas y competiciones europeas, las estadísticas colocan a Brooks (Wolfsburg) en una posición muy buena, en una escala de percentiles 100, comparado con su competencia posicional en la selección nacional: Walker Zimmerman (Nashville), Miles Robinson (Atlanta), Chris Richards (Hoffenheim), Erick Palmer-Brown (Troyes), Cameron Carter-Vickers (Celtic) y Aaron Long (New York Red Bulls).
Aún así, esta comparación indiscriminada es un ejercicio abstracto, pues confronta jugadores sin importar si sus ligas (MLS, Bundesliga, Ligue 1, Premiership) son más o menos exigentes. Es decir, si un jugador de MLS tuviera valores más altos que uno que jugase en Europa requeriría tomarlo con prudencia al ser contextos diferentes.
ACLARACIONES: Para el siguiente estudio se utilizaron datos, a fecha de 27 de mayo, de los últimos 365 días, que comprende la temporada 2021/22 para los jugadores en Europa, y el final de 2021 e inicio de 2022 para los de MLS. A los de MLS no se les pudo comparar con el parámetro europeo de las cinco grandes ligas, se hizo con sus homólogos de MLS. No se encontraron datos para Mark McKenzie. En la escala de percentiles 100, cuanto más cerca del valor 100, más cerca de la élite o los mejores en su parámetro (Europa / MLS).
LEYENDA: JB (John Brooks), WZ (Walker Zimmerman), MR (Miles Robinson), CR (Chris Richards), CCV (Cameron Carter-Vickers), EPB (Erick Palmer-Brown) y AL (Aaron Long).
¿Qué dicen los datos defensivos?
En el último año, siguiendo el parámetro establecido (cinco grandes ligas y competiciones europeas) y comparando a Brooks con su competencia posicional en la selección, es cierto que las estadísticas defensivas no le colocan en una posición muy favorable en la escala de percentiles 100, pero ni mucho menos en una desfavorable, tal y como se aprecia en el siguiente gráfico:
Desempeñándose en un escenario de élite (Bundesliga), Brooks aparece con unos números prácticamente similares a algunos contrapartes como Zimmerman, que compite en un nivel menos exigente (MLS), y un poco por detrás de otros como Long, que también compite en un escenario más asequible (MLS); ambos con unas cifras establecidas desde la comparativa interna de la MLS y no con el parámetro de Brooks. Un ejemplo es que en la característica de recuperaciones de balón, Brooks se ubica en el percentil 69 del fútbol europeo realizando 9,97 recuperaciones cada 90 minutos, y Zimmerman se ubica en el percentil 76 de la MLS realizando 8,97 cada 90 minutos.
Lo que está claro es que, aquí, la mejor opción dentro del grupo de talentos es Richards, con el resto de opciones apuntando primero a Brooks (por encima de Zimmerman), debido a que su desempeño es aceptable en una competición tan exigente como la liga alemana, y luego a Robinson y Long. Con respecto a la cifras tan bajas de CCV, hay que ser prudentes: no solo fue el mejor defensor central de la temporada en Escocia, sino uno de los tres mejores jugadores globales de su liga. Sus números posiblemente serían los que conseguirían Zimmerman y Long en Europa.
¿Cómo es su juego de pies?
Aunque esos datos hablaron de su contribución defensiva, no es el único factor que se ha de considerar en un defensor central. De hecho, una característica muy importante es el juego de pases. En los últimos 365 días Brooks ha demostrado sus buenas habilidades para el pase, la distribución y la creación de juego que tanto y tan bien ha desarrollado a lo largo de su carrera, situándose en una posición privilegiada con respecto a su competencia en la selección a partir del parámetro fijado (cinco grandes ligas y competiciones europeas).
Las estadísticas no mienten y estos números rompen por completo el discurso lanzado por Chuck Booth, de CBS Sports, hace más de una semana: “No es que Brooks sea un lastre”, dijo, “pero es más un defensor central de la vieja escuela que «ve la pelota», «toma la pelota», «despeja la pelota»”. Algo que es absolutamente falso. Brooks se siente muy cómodo con el balón, tanto regateando como jugando desde atrás.
En ese sentido, tanto Brooks como Richards, Robinson y Carter-Vickers se desmarcan claramente como las mejores opciones para jugar con la pelota, con Zimmerman como quinto en discordia. En cuanto a Palmer-Brown y Aaron Long, es absurdo incluirlos en la conversación: su juego de pies es terrorífico, aunque hay que tener en cuenta que las métricas les comparan a ellos con los desempeños de las cinco grandes ligas europeas y a Zimmerman, por ejemplo, solo con los de la MLS.
No obstante, Booth insiste en su columna en CBS Sports en lo contrario: “Tanto Robinson como Zimmerman […] se sienten más cómodos con el balón en los pies que Brooks”, afirmó con contundencia. Algo que si los datos y certezas anteriores aún no habían dejado en suficiente evidencia esa farsa, este vídeo sí:
En cualquier caso, Booth recalca que la ausencia de Brooks de las listas se debe a una cuestión de habilidad: “Berhalter es un entrenador que quiere jugar con un estilo progresivo en el que cada jugador pueda mover el balón en la cancha, pero no es probable que Brooks mejore lo suficiente con el balón para impresionarlo”, dijo, omitiendo no solo los datos y evidencias visuales que claramente invalidan su punto de vista (quién sabe si buscando dar consistencia a un alegato falso y muy débil de sostener), sino omitiendo también el probable conflicto extra-deportivo que existe entre ambas partes, razón por la cual Brooks está siendo excluido.
En la exigencia del fútbol europeo, los percentiles de jugadores como Zimmerman y Long probablemente no solo serían más bajos que los de Carter-Vickers, sino que probablemente estarían cercanos a los de Palmer-Brown, un jugador por cierto que sufre mucho defendiendo a campo abierto: “Es un defensor central bastante correcto en el juego aéreo, corpulento”, me dice en una conversación telefónica el experto en fútbol francés del Diario AS, Andrés Onrubia, que le ha monitoreado este año. “No le veo en un equipo que juegue con defensa adelantada. Es muy flojo con la pelota”.
¿Y su producción ofensiva?
Los fans de la vieja escuela quizá se aferren al recuerdo nostálgico del célebre gol de Brooks contra Ghana en la Copa del Mundo de 2014 –que permitió a EE. UU. avanzar de la fase de grupos y vengar la derrota contra los Black Stars en 2010– para reclamar que forme parte del roster, debido a que también puede contribuir en otras facetas del juego. Porque lo cierto es que, para ser un defensor central, Brooks siempre ha tenido un desempeño notable en la contribución ofensiva.
Una teoría que los datos de este último año confirman, situándole en una posición muy significativa en la escala de percentiles 100, comparado con sus homólogos del USMNT a partir del parámetro fijado (cinco grandes ligas y competiciones europeas).
Y aunque este no sea el medidor más importante para un defensor central, las cifras dejan a Brooks es un buen lugar. Zimmerman y Long son indiscutiblemente los números uno, luego Richards y después Brooks por encima de Robinson (debido a una mayor dificultad de la Bundesliga con respecto a la MLS). Fuera de la discusión ofensiva, en base a estas métricas, se quedan CCV y EPB.
Conclusiones
El próximo 1 de julio John Brooks será agente libre, después de no firmar una extensión de contrato con el VfL Wolfsburg. Se marchará tras cinco temporadas allí pudiendo elegir el club de destino que quiera. Y lo hará sabiendo que está capacitado para competir en las cinco grandes ligas europeas, teniendo incluso algunos ratios de habilidades no tan lejos de los mejores defensores centrales del mundo.
Dicho eso, Estados Unidos tiene en él a un jugador que posee una habilidad de pase que no tiene ninguno de sus homólogos dentro de esta selección nacional. Una habilidad de pase que sin duda ayudaría en el campo a un equipo al que le cuesta horrores mover el balón de atrás hacia adelante. No obstante, también es un jugador que sufre defendiendo en espacios abiertos y con tendencia a quedar atrapado en el campo, lo que lo ha expuesto muchas veces jugando para el USMNT. Por eso otros defensores han destacado en su ausencia y han demostrado ser efectivos en ciertos aspectos dentro del mismo sistema en el que John demostró ser ineficaz en ocasiones.
Sin embargo, después este análisis exhaustivo, la conclusión evidente es que John Brooks es uno de los cuatro mejores defensores centrales que tiene el USMNT a su disposición. Donde quizá podría haber debate es acerca de si debe o no ser titular.
Chris Richards (Hoffenheim - Bayern)
Miles Robinson (Atlanta United FC)
John Brooks (Wolfsburg - Agente libre)
Walker Zimmerman (Nashville SC)
Los que no pasan el corte seguro son Aaron Long, Carter-Vickers y Palmer-Brown.
Aunque lo más probable es que Berhalter no cite a Brooks para la Copa del Mundo, una eventual llamada para la ventana FIFA de septiembre y los dos meses posteriores de competición pueden ser claves para determinar si finalmente la mínima posibilidad de que vaya al Mundial se cumple (la grave lesión de Robinson quizá le pueda abrir la puerta de regreso). En cualquier caso, sea cual sea la decisión de Berhalter en octubre, determinar si tomó la decisión correcta no lo sabremos hasta diciembre, cuando Estados Unidos concluya su participación en la fase de grupos de la Copa del Mundo.